El navio

martes, 31 de enero de 2012

domingo, 29 de enero de 2012

Historia al estilo progre




La nueva progresía relacionada con el artisteo, en su afán de reinventar la historia y la sociedad, no duda en manipularla, o inventarse una historia ficción acorde a su ideal de como debía de ser el mundo. La finalidad de todo esto esta clara, concienciar a las sociedades venideras, de una verdad falsa, que al ser repetida constantemente se toma como autentica. Manipulando y condicionando la mentalidad de los jóvenes europeos. El caso mas reciente lo tenemos en esa fantochada de serie progre y multiculti de A3 llamada Toledo. No solo es una falsedad histórica que Toledo en el siglo XII estuviera asediada por los musulmanes. Sino que ademas es una falsedad la propia historia de las tres culturas. Tres culturas divididas en barrios claramente diferenciales y en los que raras veces se mezclaban las gentes. Otro ejemplo lo tenemos en la vestimenta de una de las protagonistas, la noble musulmana. La cual como era mas que evidente, se tenia que enamorar de un joven cristiano. Para así soltar el discurso políticamente correcto con el cual condicionar a los telespectadores con menos personalidad. Las musulmanas del siglo XIII en la Hispania dominada por el Islam. No tenían el pelo suelto, ni utilizaban las ropas que utilizan en la serie en plan “liberal”. Las mujeres musulmanas en la Hispania del XIII, eran exactamente igual de sometidas que lo son ahora en el mundo árabe, para muestras un botón en la foto. Entendemos que a las feministas y a los progres, seguramente no les guste contar la verdad, y de contar esta, quizás no fomentaría tanto el multiculti como pretende la serie, claramente intencionada y dirigida con fines políticos. Pero la realidad histórica es la realidad histórica.

La importancia de llamarse Emma West.


En 1895, Oscar Wilde, el genial escritor irlandés, publicaba La importancia de llamarse Ernesto, seguramente la obra más conocida de este irrepetible literato junto con su  inolvidable Retrato de Dorian Grey. Ernesto es el hermano imaginario del protagonista de la obra John, y también es el recurso literario que usa Wilde para hacer un retrato sobre las encorsetadas costumbres y los agobiantes prejuicios de la moral victoriana en el Reino Unido de finales del siglo XIX.


Hoy nos dicen que Reino Unido no sabe nada de dogmatismos, ni de represiones, la libertad de expresión y pensamiento es la norma general, y no hay temas tabúes ni ideas perseguidas. Pura falacia. Nada más alejado de la realidad, la opresión ideológica y la obligación de comulgar con los valores oficiales es, sin duda, mucho más agobiante, que en la denostada época victoriana. El caso y la vida de Emma West, sirve de ejemplo.
Emma West es una joven trabajadora de clase media-baja. Pertenece a eso que los sociólogos llaman con el nada bonito ni enriquecedor término de “Withe-trash” (basura blanca), término nacido en los Estados Unidos y hoy importado a Europa para referirse a los obreros de raza blanca que por el hecho de serlo están excluidos del sistema de ayudas sociales, destinado a mantener exclusivamente a los inmigrantes “no blancos”; constituyen la parte de la sociedad europea más golpeada por la inmigración, el paro, la inseguridad y la desindustrialización  y son los permanentes olvidados de todos los gobiernos que están llevando a Europa occidental al irreversible caos.


A mediados del pasado mes de noviembre, Emma West viajaba con su pequeño hijo en un metro del sur de Londres, lo hacían rodeados de una abrumadora mayoría de inmigrantes extraeuropeos, una situación  cada vez más habitual en Londres. La tensión en el vagón del metro era patente y en un momento determinado, Emma empezó a decir en voz alta su opinión sobre la invasión que está sufriendo su país, y  las nefastas consecuencias de la avalancha migratoria en suelo británico, a la vez que abrazaba y protegía con fuerza a su pequeño.


Para desgracia para Emma, la escena es filmada por las cámaras del metro. Una brutal campaña de linchamiento, de tintes orwelianos, la filmación se sube a youtube y se señala como el ejemplo del “racismo e intolerancia que anida entre los población blanca británica” (¿pero no estaban todos desbordadamente contentos con la invasión multicultural de sus ciudades, barrios y vagones de metro?). Orquestada desde todos los medios de comunicación y centrales de lo políticamente correcto, la escena es difundida por los grandes periódicos británicos, más de 1.000 noticias al respecto aparecen en diversos medios impresos y digitales, en youtube los comentarios sobre el vídeo llegan a 247.336, todos ellos coinciden en la sentencia: “Emma West es culpable”. Sus defensores abren una página en su apoyo en facebook, que los administradores eliminan rápidamente, por aquello de que la libertad de expresión es sólo para el que exprese lo que debe expresarse.


A los pocos días, la fiscalía británica (tan pasiva para las manifestaciones de integristas islámicos en Londres, Manchester o Birmingham) actúa con toda celeridad, deteniendo a Emma acusándola de “alteración del orden público con el agravante de racismo” y poniendo a su hijo bajo el cuidado de una institución social. Poco antes de navidades  el juez determina que siga en prisión “para garantizar su propia seguridad” (¿) y pase encerrada esas entrañables fechas, mientras su hijo las pasará encerrado en una institución  social bajo vigilancia especial. Ni siquiera el padre del niño es autorizado a visitarlo durante esos días.


El 3 de enero, asegurándose así que no había “indulto” navideño, se fija una nueva cita. Durante la misma, El Tribunal Croyndon le concede la libertad bajo fianza y le permite volver temporalmente a su casa, con su hijo, con la prohibición expresa de volver a viajar en metro. Durante el juicio, varios militantes y dirigentes del BNP, acuden para apoyar a Emma, el partido identitario británico había lanzado varias campañas de solidaridad con Emma incluyendo envíos masivos de tarjetas de navidad. Para los medios oficiales el BNP es parte de esa “basura blanca” que desearían no existiese.


El mismo Tribunal que la juzga, no da por cerrado el caso y  fija para el 17 de febrero una próxima vista, en el que su caso será revisado. Seguiremos de cerca la nueva sentencia y cualquier novedad en el caso de Emma West a la que desde aquí, modestamente, le hacemos llegar toda nuestra solidaridad, y todo nuestro cariñoso apoyo.  Hoy todos los europeos somos en parte, Emma West, aunque la mayoría lo sean en silencio.

domingo, 22 de enero de 2012

Cine y del bueno...


En el campo semántico de la Guerra Civil y alrededores en el cine español todo es blanco o negro; el maniqueísmo de cuento infantil es condición sine qua non; los tipismos de nuestro cine histórico exigen, aún hoy, la caricaturización de los "malos" para resaltar las virtudes de los "buenos". En el cine español guerracivilista las fronteras están enfatizadas con fluorescente, eso implica que no retratar a los esbirros del franquismo con cuernos y cola se sale del estándar. Tanto como para que no exista cine que hable desde el otro bando; los complejos ancestrales de nuestra industria vetan la caracterización humana de los vencedores; el cine se arroga una función didáctica en torno a un tabú indiscutible; la realidad desde el otro lado del frente es una verdad incómoda que más vale silenciar.

Alemania lleva algo más de una década exorcizando fantasmas y proyectando, desde el cine, una mirada exenta de prejuicios al pasado. Allí sí derribaron el tabú que impedía reflexionar en tres dimensiones sobre el papel de unos y otros; el nazismo ya no es territorio prohibido. Aquí seguimos como hace treinta años y más allá del Berlanga de turno los franquistas siguen siendo los ogros de cuento que fueron siempre, sin grises, sin preguntas.

Ese es el lastre más pesado del cine histórico nacional ambientado en los aledaños de la Guerra Civil, y probablemente por esoGerardo Herrerono ganará Goyas conSilencio en la nieve. Y no lo hará porque se atreve a escarbar en los desvelos del bando "mal". Las atrocidades perpetradas desde aquel lado están en los libros, y en el cine, pero la humanidad del soldado raso en el bando vencedor está mal vista. Herrero pone su granito de arena para vencer esta ancestral cerrazón y derribar al fin un muro. Su película se infiltra en la aterradora rutina de los sufridos integrantes de la división azul que destrozaron sus vidas y torturaron sus conciencias a treinta grados bajo cero en el invierno perpetuo de la Rusia comunista.

Herrero elude el brochazo político y el cliché de guerra civil buceando en la miseria cotidiana de los voluntarios que se lanzaron al infierno de un frente aún más infame que el doméstico luchando en defensa de los intereses de la Alemania nazi mientras soñaban con el retorno, mantenían correspondencia con sus seres queridos y echaban de menos a sus novias y retoños. En fin, personas, soldados y sufridísimas víctimas de una guerra atroz. Es muy básico, pero es inédito en nuestro cine; los malos también lloraban.

Con todo, y a pesar de la impecable presentación del contexto histórico-político, no distorsionado por segundas y terceras lecturas,Silencio en la nievees un absorbente thriller de serial-killer con regusto conspiranoico. Herrero propone una adaptación modélica que hace del equilibrio su mejor virtud. Hay un drama histórico-bélico que aviva el fuego, el retrato de una amistad de circunstancias impecablemente presentada entre dos militares desencantados que tiempo ha perdieron el hilo del ideal patriótico que los llevó a penar por la nieve rusa, y hay motor y nervio en forma de pesquisa entre la podredumbre, al calor de una contradicción con mucha sustancia; el quebradero de cabeza del alto mando por resolver la muerte violenta de un anónimo soldado raso en una rutina de muerte, entre una montaña de cadáveres sin nombre.

Silencio en la nievese postula como, quizá, la mejor película de Gerardo Herrero hasta la fecha, la más compleja y redonda, la mejor madura. Hay buen material literario como apoyo y una pareja de excelentes actores al mando del aparato, y Herrero no desaprovecha sus bazas.

viernes, 20 de enero de 2012

GRACIAS



Amigos, ya hemos cumplido nuestro objetivo, las 1000 visitas... gracias de antemano, por vuestro apoyo, paciencia a la hora de leer nuestras parrafadas y por el hecho de tener en favoritos nuestra página. Todo esto nos da alegría, apoyo y fuerza. Pues lo dicho, MUCHAS GRACIAS!!

miércoles, 18 de enero de 2012

Canciones y de las buenas...

   

La quiero, la quiero ver levantada..
un viva, un viva España no basta...
La quiero, la quiero ver levantada..
Por ella, por ella lucho y por ella...
grito siem, grito siempre arriba España.
grito siem, grito siempre arriba España.
Un viva, un viva España no basta...

martes, 10 de enero de 2012

Sabiduría popular



A año tuerto, labrar un huerto.
A árbol caído, todo son piedras.
A beber me atrevo, porque a nadie debo y de lo mío bebo.
A borrico desconocido, no le toques la oreja.
A buen hambre no hay pan duro.
A cada paso, un gazapo.
A cada santo le llega su día de fiesta.
A carne mala, buena salsa.
A casa del amigo rico, irás siendo requerido, y a casa del necesitado, irás sin ser llamado.
A donde entra mucho vino todos los vicios hacen camino.
A fácil perdón, frecuente ladrón.
A hijo malo, pan y palo.
A hombre recién levantado, ni le propongas negocios ni le pidas un prestado.

lunes, 9 de enero de 2012

¿Qué fue de la legión perdida?

A finales de la primavera del 53 a.C., un enorme ejército romano comandado por  Marco Licinio Craso, el hombre más rico y arrogante de Roma, triunviro junto a César y Pompeyo y gobernador de Siria en aquel año, se adentró en territorio parto dispuesto a lograr en los confines de Asia el honor y la gloria que no podía comprar con su inmensa fortuna. Fue el 9 de Junio cuando se encontró con el general parto Surena al frente de un contingente de caballería ligera y catafractos (caballería pesada) Aquel enfrentamiento se produjo en la desolada planicie de Carrhae (hoy Harrán, en Turquía), y se saldó con la más ignominiosa derrota de un ejército romano en Oriente. De los cerca de 40.000 efectivos que movilizó Craso, sólo volvieron a Siria unos 6.000 hombres al mando del cuestor Cayo Casio Longino (uno de los posteriores asesinos de César). Unos 20.000 legionarios dejaron su sangre y vida en el desierto, así como Craso y su hijo, pero… ¿Qué sucedió con el resto?

La leyenda de la legión perdida es fascinante; sabemos por Plutarco y Tito Livio que no todos los prisioneros fueron esclavizados en las minas de Bactriana (hoy Afganistán), sino que una parte de ellos pudieron ser utilizados como tropas auxiliares en los confines del Imperio Parto, formando una primera línea de choque cerca del río Oxus (hoy Amu Daria) ante la presión de los nómadas de las estepas, los hunos.

Nunca más se supo de ellos; Marco Antonio trató de invadir Partia unos años después dispuesto a vengar a Craso y su expedición contra el rey Fraates acabó en un absoluto desastre, sumando casi 10.000 muertos más a la lista negra que rodeaba la campaña parta. Años después, Augusto, menos beligerante y más diplomático, trató de recuperar las águilas, pero sólo consiguió un intercambio de prisioneros sobre el 19 a.C. Y tras las postreras gestiones del princeps, el olvido se tragó a los cautivos de Carrhae hasta que la tecnología y el conocimiento global de la Historia nos ayudaron a atar cabos; recientes investigaciones nos permiten conjeturar una hipótesis tan insólita como factible: quizá los extraños soldados que mencionó el historiador chino Ban Gu en su relato sobre la defensa de la ciudad de Zhizhi en el 36 a.C. (hoy Dzhambul en el Uzbekistán) pudiesen ser los restos de las legiones de Craso; este cronista describió en su biografía de las gestas en los confines de Xinjiang del general Gan Yanshou como se encontraron con hombres veteranos y muy disciplinados que se fortificaban en campamentos cuadrados de madera y que luchaban siempre «alineados y desplegados en una formación como de escamas de pescado», una descripción muy gráfica del testudo romano… ¡Una legión contra los ejércitos de la dinastía Han!



Tras duros combates, la ciudad de Zhizhi cayó y los chinos deportaron cerca de un millar de aquellos bravos soldados, alojándolos sobre el año 5 d.C. en una nueva ciudad en el territorio de Zhelaizhai, ya a las puertas del desierto del Gobi, a la que llamaron Li-jien (adaptación de la palabra legión, que era como los chinos conocían al fastuoso país que se extendía más allá de Alejandría, el Imperio Romano) Este lugar cambió de nombre años después, siguiendo las tendencias de Confuncio, para llamarse Jie-Lu (que significa cautivos)
A día de hoy, en Zhelaizhai sigue habiendo personas de ojos azules o verdes, rubias o pelirrojas, o con nariz aguileña y cabello rizado; además, en los habitantes de la zona hay una coincidencia del 46% con el ADN de la población europea… ¿Serán los herederos de la Legión Perdida?


domingo, 8 de enero de 2012

La silenciosa conquista china



Basada en su creciente poderío económico, su particular modelo autoritario y el músculo de 1.300 millones de personas, China está convirtiéndose en la potencia hegemónica del siglo XXI. La crisis económica de 2008, cuyas consecuencias han afectado profundamente a Occidente, no ha hecho más que acelerar este proceso.

A partir de una investigación única en su género, realizada por dos periodistas españoles a lo largo y ancho de 25 países del mundo en desarrollo, este libro permite descifrar las claves y entresijos de la actual expansión silenciosa de China por el planeta, incluidas sus consecuencias socio-económicas, medioambientales y geopolíticas.

Desde las minas de cobre de la República Democrática del Congo y las explotaciones de gas natural del desierto de Turkmenistán, hasta el impacto medioambiental en los bosques de Siberia o los grandes proyectos chinos de infraestructuras en la Amazonía ecuatoriana o el Nilo, los autores describen a través de historias humanas cómo China está deshaciendo el statu quo y qué impacto tendrá esto para el futuro de nuestras sociedades.

¿Cómo extiende sus tentáculos el gigante para garantizar su suministro de petróleo a largo plazo? ¿Con qué estrategias desbanca Pekín a su competencia occidental? ¿Cómo encaja África la avalancha de emigrantes chinos? ¿Cómo ha logrado Pekín reabrir la milenaria Ruta de la Seda para conquistar el planeta, desde Dubai hasta Cuba, con sus productos Made in China? ¿Qué secretos esconde la estrecha relación de Pekín con algunas de las más crueles dictaduras del planeta?

Poniendo al servicio de esta investigación un amplio conocimiento previo de China, los autores llevarán al lector a lo más recóndito del mundo chino gracias a los más de 220.000 kilómetros recorridos y 500 entrevistas realizadas en lugares tan dispares como la Venezuela de Chávez, el Irán de los ayatolás o el Sudán que acaba de escindirse en dos. Una obra a medio camino entre el mejor relato de viajes y el periodismo de investigación más riguroso para seguir la pista a un despliegue de tentáculos que está cambiando el mundo.

Música y vuelta al trabajo...

sábado, 7 de enero de 2012

El ejército de soldados invencibles de Stalin

Los hoplitas, las legiones romanas, los Tercios, los jenízaros… han sido considerados los mejores guerreros/soldados a lo largo de la Historia. Más tarde, la ciencia ficción ha tratado de crear el soldado invencible: sofisticado armamento, soldados robots, modificaciones genéticas… y los humancé (híbrido entre humano y chimpancé). El caso es que el ejército de humancé no fue fruto de la ciencia ficción sino de la mente de un genocida: Stalin. La idea de Stalin, supongo que sacada del libro “La isla del doctor Moreau” de H.G. Wells, era crear un ejército de híbridos entre humanos y chimpancés con lo mejor de cada uno: la inteligencia humana combinada con la resistencia y capacidad física de los simios. 

Unos años antes, el biólogo ruso Ilya Ivanovich Ivanov, especializado en el campo de la inseminación artificial y pionero en la obtención de animales híbridos, había obtenido el Zubrón (híbrido entre vaca y bisonte), el Zedonk (híbrido entre cebra y burro)… Éste era su hombre. En los 1925, Ilya había obtenido el permiso del Instituto Pasteur de París para experimentar con chimpancés en Kindia (Guinea Francesa). Aquel proyecto obtuvo respaldo económico, 10.000 dólares, de Moscú. En esta ocasión el experimento consistía en inseminar a hembras de chimpancé con esperma humano, pero tras varios intentos no hubo ningún resultado. Así que, Ilya decidió darle la vuelta a la tortilla… inseminaría a mujeres con el esperma de chimpancés. Aquello ya era demasiado y las autoridades francesas le revocaron el permiso. Regresó a Rusia, que todavía creía en su proyecto, y continuó sus trabajos en Sujumi (Abjasia) donde las autoridades rusas habían creado un campo experimental con primates.
Para seguir con sus experimentos en Sujumi contaba con un chimpancé y cinco mujeres… voluntarias. Antes de poder inseminar a las mujeres el chimpancé murió, Ilya cayó en desgracia y fue condenado al exilio.
En los años 70 apareció Oliver, un chimpacé casi humano, que se pensó que podría ser un híbrido. No fue así, pero era un tanto especial. 

domingo, 1 de enero de 2012

Feliz solsticio



Otro año más, y otro año menos... Solo pedimos salud y buena suerte para este nuevo año, para que continueis siendo igual o incluso peor de lo que sois. Así pues, ¡¡a empezar bien el año!!.